Abel Caballero pide reconducir la situación en Cataluña porque “se está estableciendo un reto al estado de derecho de España”
El Presidente de la FEMP se ha referido al actual debate secesionista como “una derivada política de la insensatez y la intolerancia”, y lo ha contrapuesto a la Junta de Gobierno de la Federación, en la que Convergencia está presente, como ejemplo de integración. En su intervención en Nueva Economía Fórum ha defendido “una forma diferente de entender la acción política local”, con mayor capacidad de los municipios para dar respuesta a las demandas ciudadanas. Caballero ha insistido en una reforma de la Constitución que contemple un modelo adecuado de financiación local y de competencias para los Ayuntamientos
El Presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha dicho esta mañana que vivimos “un momento de una trascendencia especial, porque desde una derivada política de la insensatez y la intolerancia se está estableciendo un reto al estado de derecho de España”. Por ello, ha mostrado su apoyo “al conjunto de las instituciones que están revertiendo esa situación al marco de la política y no al de las fugas hacia adelante”.
Con ello se ha referido a la actual dinámica que se vive en Cataluña, insistiendo en que “es un momento de acción de la política y del cumplimiento de las leyes”. Y ha puesto a la FEMP como ejemplo al recordar que la presencia de Convergencia en la Junta de Gobierno: “es el estándar deseable de funcionamiento de España”. Y ha añadido que “incorporar a Convergencia en la Federación española va en la dirección de la integración” y que ”conviene tender puentes para que una parte de Cataluña sienta que tiene un espacio aquí”.
Reconocimiento constitucional
Abel Caballero también reclamó reconocimiento constitucional de la política local al señalar que cuando se modifique la Constitución será preciso incluir también los artículos que garanticen la autonomía absoluta de los Ayuntamientos, que las competencias locales queden establecidas en el nuevo texto y que las líneas de financiación de los Ayuntamientos vengan marcadas por la Constitución.
Apostó por consolidar en la Carta Magna un modelo de tres Administraciones independientes y no piramidal, e insistió en que “los Ayuntamientos vertebramos España”. Añadió que su objetivo durante los cuatro años de mandato al frente de la Federación es plantear la revolución municipalista en nuestro país.
